Pero no
puedes hacerme esto: aparecer y desaparecer. Estoy preparada para estar sin ti
de forma permanente, soy capaz de hacerme a la idea de tu ausencia y vivir con
ello. He llorado hasta que me ha dolido como dientes en el alma. Y ahora, ya me da igual, de verdad que me da igual. Pero lo
que no quiero es tenerte un instante, aferrarme a él y que al abrir los ojos,
no estés. Y al siguiente instante sigas sin estar, y
al siguiente tampoco y al siguiente, tal vez, vuelva a tenerte. No me
compensa, tú no me compensas. Si quieres quedarte, quédate, sabes que eres
bienvenido; pero si vas a irte, vete ya y hazlo rápido e indoloro. Arráncate de
golpe de mí. Y consigue que tu ausencia no me duela más que tu presencia. Quiero
un contigo o un sin ti, pero no lo que hay en medio, no quiero tus restos ni tus pedazos ni las sobras de tu
tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario