Me has enseñado muchas cosas, a lo bruto pero enseñanzas al fin y al cabo. Yo he sido tu mayor aprendiz, sin pedírtelo, aunque en el fondo lo necesitaba. Y esto ha sido una de las razones por las que te he odiado y te he querido como a nadie. ¿Odiado? por que sabias perfectamente lo que necesitaba antes de que yo misma me diera cuenta, ¿querido? por enseñármelo y mostrármelo sin pedirte nada a cambio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario